Reflexiones 2da. Semana de Adviento

Semana 1
Semana 2
Semana 3
Semana 4

Les presentamos hermosas reflexiones escritas por P. Grostefan en el libro Caminos de Adviento, de Ediciones Du Signe.

Las reflexiones de cada semana tienen un especial énfasis: la primera semana corresponde a la Espera, la segunda a la Confianza, la tercera a la Prisa y la cuarta a la llegada de Cristo.





Segunda Semana de Adviento



La Confianza

¿Cuándo llegará al fin
el prometido de Dios?
¿Cuándo llegará el día
en que nuestra espera
será satisfecha?

El lobo convivirá con el cordero,
en praderas sin mancha.
El leopardo será amigo del cabrito,
el cachorro de león con el ternero.
El león pacerá con la vaca y la cabra.
El niño pequeño
jugará
con la serpiente y el áspid.
El hombre
será hermano
de su hermano,
será de nuevo el paraíso
en la tierra.

Ven Señor,
date prisa.
Los campos ya blanquean,
la cosecha está próxima.

Librará al pobre que súplica, al
afligido que no tiene protector.
Cuidará del pobre.
Salmo 72, 12-13



Juan Bautista


¿Cuándo vendrá el prometido
por Juan Bautista,
el Cordero de Dios,
el Elegido?

Él había dicho:
“No temas, pequeño gusanito,
no tengas miedo pobre mortal,
yo vengo a socorrerte.”

Juan lo señaló
delante de sus discípulos más fieles
y ellos le siguieron.
Juan no era la luz:
él era su testigo.

Nosotros no somos la luz,
sino una pequeña lámpara que ilumina
en la espera y en la oración.
Abre tu puerta, prepara tu corazón para que,
cuando Él venga, te encuentre de pie,
preparado para recibirle.

La mano del Señor ha hecho todo esto.
Isaías 41, 20





Corazón Abierto

Vengan a mí,
acudan todos.

Mi corazón está abierto para
recibirlos.
Pidan y yo les daré;
Llamen a mi puerta
que yo les responderé
enseguida.

Los que sufren,
sepan que yo comparto su
sufrimiento;
Los que lloran,
sepan que yo comparto su llanto.
Soy humilde de corazón.

Si la fatiga les cansa,
yo seré su descanso.
Tomen mi yugo que es ligero
y el peso que les aplasta,
Yo le llevaré también.

El Señor es compasivo y
misericordioso, lento a la ira y lleno de amor.
Éxodo 34, 6





Que se Haga la Luz

Él que había dicho:
“Que se haga la luz”;
Él que había dicho:
“Que haya firmamento”
Él que había dicho:
“Que las aguas bullan de vida”
Él que había dicho:
“Que la tierra sea fecunda”
Él que había dicho:
“Hagamos al hombre y a la mujer”
Es el mismo que ha dicho
al paralítico que se levante,
que tome su camilla
y se vaya a su casa.
Que su palabra haga estallar
en nosotros la vida
y habrá luz.

Hoy hemos visto…
Lc 5, 25