Carta a los Reyes Magos y... al Papa

La navidad es una época en la que uno debe unirse con su familia y no sólo esperar regalos.

Por: Marcelino de Andrés | Fuente:

Chuchi, Sonia, Sergio y el peque acaban de escribir su carta a los Reyes Magos. Varios chavales italianos, el año pasado, además de sus peticiones, le enviaron también al Papa unas líneas.

Os confieso que me he divertido un montón. Me he pasado horas, releyendo y corrigiendo estas cartitas. Alguno escribió "velenes" con v. No es culpa de ellos. Como os decía, he disfrutado como un enano. Y de paso, he desempolvado un poco mis recuerdos de niñez. Me he sentido una figurita más del portal.

El Papa les decía en una carta a todos los niños del mundo: "La Navidad es la fiesta de un Niño, de un recién nacido. ¡Por esto es vuestra fiesta!... Pensad en vuestra madre, que os dio a luz,




y en vuestro padre... ¡Dios os ama!...¡Qué importante es el niño para Jesús! El hombre no puede vivir sin amor".

¿Sabéis que le han contestado estas criaturas de Dios? Ahí os va la primera. La firma Lorenzo. Casi no le entendía la letra: "Querido Papa: tú me has escrito y yo te respondo. Gracias por pensar en nosotros, los niños. Algunos mayores dicen que no valemos nada. Que sólo damos molestias a los padres y que nos tienen que comprar muchas cosas... "

Aunque este Lorenzo tiene siete años, lo noto bastante despierto para su edad. Así son los chavales. Se dan cuenta de todo. Son esponjas. Perciben todo. Lo captan todo. Su materia gris es de pegamento. ¡Los niños no son tontos!

Tengo aquí la de Carlos: "Querido Papa: Yo quisiera poner el Belén, pero en casa no tenemos las figuras y mis padres sólo quieren que pongamos el árbol. Estoy triste por esto. Pienso en los belenes que preparan mis amigos con musgo y les envidio. Cuando sea grande y yo pueda mandar, entonces lo haré".

Este era el de la ortografía.





Lucas le ha escrito lo siguiente: "Tú, Papa, nos invitas a celebrar la fiesta con nuestros padres, pero mi papá ha hecho las maletas y se ha marchado".

Sin comentarios. Mejor hablamos de estas cosas en otro momento. La Navidad es para ser felices.

Martita, dos ojitos color firmamento. Toda una ricura: "Quisiera darte un beso, pero como no vivo en Roma, te mando dos. Tú has dicho que los niños son importante para Jesús. Pero las personas mayores me dicen siempre que podré hacer las cosas cuando sea grande. Yo estoy muy contenta de ser niña y de poder jugar con Miriam, mi hermanita de dos años. Es lo que más me gusta y me divierte".

Martita, qué nombre tan bonito. Nombre de estrella. Cuando seas grande, ¿seguirás viendo la Navidad con ojos de niño: castillos encantados, con torres y almenas de azúcar y dragones de cartón? Navidad, unos días suaves como la nieve.